Figuras del monte. Iruelas: descenso de Cerro Agudo.
Solo un verso
Un verso. Solo un verso.
Quiero tener un verso
excepcional, sublime,
que me tenga prendido a la montaña,
que sea luz divina,
que me atrape
y ya no exista yo sin su presencia.
Quiero tener un verso
guardado en la memoria,
sentirlo como un faro,
degustarlo
cuando la musa brille por su ausencia.
Quiero tener un verso,
no me importa de quién, pero que grite
en todo mi interior.
No porque lo haya escrito.
Me da igual de quien sea.
Quiero tener un verso
que me distraiga, me lleve; que me salve…
¡Quiero tener un verso al que agarrarme!