martes, 1 de septiembre de 2009

ESTE ES EL COMIENZO DE UNA GRAN AMISTAD


Ahora que me pregunto
de qué sirve mi boca
y dudo.
Para qué usar las manos
si no son «erramienta».
Cómo mirar sin ver
la utilidad concreta
del enfoque del ojo...

Ahora que sé tus trampas,
que conozco el latido de tu interés
y el odio que regalas en dosis
como un medicamento.
Ahora que atisbo el límite
del rencor que nos une
y nos separa...

debo darte el abrazo,
pues de nuestras miserias
puede nacer un tiempo
de amapolas y pastos.

Brindemos por el fin
de este camino abierto
para el puñal y el asco.

Que otros se ensañen
mientras crezca esta cuenta
de alimañas que somos.

La alfombra de cristales
se tiende a nuestros pies.
Pisémosla seguros,
pues vamos bien calzados.


Luis Felipe Comendador
---

El boxeo es cosa de hambres.


Jesús URCELOY
urcelología
---

Poema de otoño


En el otoño a los árboles
se les caen las hojas.

Un tapiz, dorado y esmeralda,
alfombra los caminos.

En el sosiego, presencias ausentes
parecen transitarlos.

Con los fríos, el invierno vendrá;
y la nieve dibujará retazos

de antiguos sueños,
de armonía, de reposo.

Vendrá la primavera.
La vida brotará…

Días de renovadas tareas y pesares.
De belleza exaltada.

Pero, cuando retoñe la primavera,
añoraré la paz;

esta paz que me invade.

EP
---

Caminaba detrás de unas caderas
púberes, casi mozas, de lolita
pícara e inocente, y una cita
eran para mis ojos sus maneras.

Yo de piedra no soy. Ya mis maderas
crujen, y en primavera me visita
ese brote que nace o resucita
al sonido del mar y las palmeras.

Coleaba su pelo por su espalda;
eran sus mallas más que minifalda
y sus vaivenes eran... medicina.

Si por casualidad ella se para.
Si se vuelve, me mira y... preguntara,
yo le respondería: tú camina.


pbernal
2009
---

No hay comentarios: