IX Las cuentas
En líos de dinero y de cocina,
lo siento, no deseo estar metido,
(a no ser que se trate de cocido
con morro, con tocino, con chacina).
Las cuentas, don Alberto las afina:
él tiene su misterio ya sabido
y trata de ganar lo convenido,
más lo que no proclama y vaticina.
Del catering que cargan de mañana
en el coche-vagón del restaurante
del tren que se desliza por las vías,
el hombre determina la macana,
el menoscabo, el gasto, lo sobrante,
y el precio del arroz y las judías;
pbernal
de tren de otoño
---
Necrológica
Epitafio (al estilo de la Antología de Spoon River, de Edgar Lee Masters)
para Jesús Urceloy
“Sé que la muerte no es descanso,
sino aventura, (…)”
La muerte tarde,
de José Hierro
Yo soy Grande: soy Poeta:
mi ser todo lo domina.
Es el Saber medicina
que me agrada y etiqueta.
Bajo esta losa tan quieta
no paro de demoler
versos que quiere poner
en un poema fingido
-por eso aquí me ha metido-
ese alumno del Taller.
Ese alumno del taller
se considera poeta;
y yo, cada papeleta,
cara se la haré vender.
Desde que duermo a placer
en tan oscuro recinto,
no pruebo pinta ni tinto,
y el Hilo me lo ha cortado…
El día menos pensado
lo mandaré al Laberinto.
Aplauden. Los siento afuera.
Han venido a visitarme.
¡Tirsa!, ¡Carmelo…! ¡Tiradme
donde asirme! Yo quisiera
despertar en la pradera
al arrullo de una nana;
lavarme en la palangana…,
que ya está bien de aventura.
O que le pongan sutura
al Hilo roto de Ariadna.
pbernal 2008
---
viernes, 24 de octubre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Es muy divertido tu epitafio para Urceloy.Me gusta mucho.Seguro que la clase fue divertida.Tuve cosas que hacer y no pude ir. Asisti después al recital de Beatriz Ros.Es una joven poeta dentro de la nueva poesía que escribe muy bien.
Fue divertido. En el taller Urceloy nos habló del tanka y del haiku, de modo que el próximo lunes eso es lo que hay que llevar. Supongo...
Publicar un comentario